Al inicio se da cuenta
de que es distinta al hombre,
y más tarde o
menos temprano
ser mujer
se convierte en un duro
trabajo.
Y más tarde o
menos temprano asimila
que ser Mujer
acarrea privilegios
lastimosos y desgarradores
privilegios
con los que tendrá
que luchar.
Comprende, de alguna forma,
que el mayor daño
sería ser sometida y obedecer,
y más tarde o menos temprano,
ella, se ofrece, de alguna forma,
ella utiliza con resignación e irritación
las hirientes disyuntivas
ella tiene miedo y quiere
ser una mujer adulta
y llega a ser adulta mujer
y teme
ser madura.
Algunas veces elige, pero
en otras ocasiones es elegida
por uno o mil hombres
que se convierten en sus defensores,
sus aniquiladores,
sus esposos,
y mancebos
que representan para bien
o para mal
cada uno de los niveles
de todo lo que ocurre
entre una Mujer
y un hombre.
En ocasiones su cuerpo se rompe
y deja salir un retoño,
repetidamente su organismo es
despedazado
con un dolor inaguantable
aunque más repetidamente
su cuerpo es despedazado
con un dolor
tolerable.
Pocas veces o ninguna
un hombre
entra en ella,
por mil causas
distintas para ella,
aunque jamás por ternura
que ella de alguna forma
rastrea
y de alguna forma
halla.
Cuando la mujer ha aguantado
lo bastante
y se arruina y no se arruina
y pare
o aborta
y solloza o no solloza
desde el vestido de novia
al del duelo de viuda
aprende
y cuando está cansada
entiende
que ya es anciana.
Lo comprende
más temprano o
menos tarde,
y se prepara
para adaptarse a la vida,
que una anciana
de algún modo
vive
en un planeta que menosprecia
a las ancianas.
Ella se prepara para acomodarse
a algo similar a una vida
que no mereció.
No hay comentarios:
Publicar un comentario