El banco tenía una placa
que sólo los hombres invisibles podíamos descifrar:
"Se pueden sentar y observar"
rezaba aquella placa
que un hombre cualquiera no hubiera podido descubrir.
A pesar del mensaje
ningún hombre tomo asiento
para observar
desde este banco que agoniza de tristeza,
esquelético y sombrío,
en la acera del paseo.
Canet
Bancos para gente diferente. Me gusta mucho tu estilo Canet. Un saludo!
ResponderEliminarHola, Canet. Te he nominado PARA EL BLOGGER RECOGNITION AWARD 2018. Puedes verlo en https://bailandoconlaspalabrass.blogspot.com/2018/10/me-han-nominado-para-el-blogger.html
ResponderEliminarSaludos.